El negacionismo mata: la violencia machista no entiende de edad
La muerte de Chloe, de solo 15 años, ha marcado un día internacional ensombrecido por 42 feminicidios en 2024
El 25 de noviembre de 2024 ha quedado marcado por la trágica noticia del asesinato de Chloe, una adolescente de 15 años, en Orihuela. Su muerte a manos de su expareja, de tan solo 17 años, ha evidenciado que la violencia machista no entiende de edad y ha puesto de manifiesto la necesidad de seguir trabajando sin descanso contra la violencia de género.
Este año, la cifra de víctimas ha alcanzado las 42 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas, 1.286 víctimas desde que existen registros. Desde el PSOE se ha alzado la voz para exigir igualdad y libertad en un momento crucial para la sociedad española. El partido ha manifestado que llegará un día en que no será necesario conmemorar esta fecha como el día de la lucha contra las violencias hacia las mujeres, pero, mientras ese momento llega, es imperativo seguir avanzando en derechos, en igualdad y en libertad.
La unidad del movimiento feminista ha sido fundamental para visibilizar una violencia que, durante décadas, ha permanecido oculta bajo el amparo de un sistema que ha perpetuado la desigualdad. El PSOE ha destacado la importancia de mantenerse firme en la lucha por todas las mujeres asesinadas, enfatizando que la política es el instrumento fundamental para seguir avanzando mediante leyes, estructuras institucionales de protección, prevención y reparación de las víctimas.
En este contexto, la renovación del Pacto de Estado se ha presentado como una necesidad urgente. Las instituciones han reconocido que España, pese a ser un referente internacional en materia de igualdad, necesita seguir avanzando con más recursos y legislación ante los nuevos desafíos que han surgido. Entre estos nuevos retos destacan formas emergentes de violencia como la violencia vicaria, el acoso a través de las redes sociales y la pornografía en Internet, que afectan especialmente a los más jóvenes, quienes muchas veces carecen de herramientas para identificar y rechazar estas formas de violencia
Desde las filas socialistas se ha advertido sobre el peligro que representa el negacionismo de la violencia machista. Esta postura, que niega la evidencia del machismo estructural, resulta especialmente nociva, ya que, al transmitir a la ciudadanía que no existe el problema del machismo ni la dominación patriarcal sobre las mujeres, se genera una frustración que puede desembocar en más violencia. El negacionismo representa un retroceso democrático que obstaculiza el avance hacia una sociedad más igualitaria.
La sociedad española ha gritado en esta jornada y ha dicho basta, convirtiendo esta palabra en el nuevo #MeToo que ha unido a todas las mujeres. El asesinato de Chloe ha demostrado que la educación en igualdad sigue siendo una asignatura pendiente, y que el negacionismo mata. La lucha contra la violencia machista no puede esperar más y requiere del compromiso de todas las instituciones y la sociedad en su conjunto.
Los representantes socialistas han insistido en que la única manera de honrar la memoria de las víctimas es continuar trabajando en el fortalecimiento de las estructuras de protección y en la implementación de políticas públicas efectivas que garanticen la seguridad y la libertad de todas las mujeres. El camino hacia la igualdad real requiere de un esfuerzo sostenido y del compromiso inquebrantable de toda la sociedad.
